De normal nunca he sido de gofres, tampoco tenía gofrera y los que vendían por ahí los evitaba al ser demasiado azucarados.
La verdad es que me compré la gofrera al ver las preciosas imágenes que circulan por Instagram de desayunos. Con una mesa impecable y variada: fruta, zumos, café y unos más que apetecibles gofres.
Habitualmente en casa solemos desayunar gachas con avena u otros cereales. Es un tipo de desayuno que me encanta y aporta mucha energía. Sólo recordarte que un buen desayuno es esencial para no sentirte cansado y encarar bien el día.
Los gofres los solemos tomar ocasionalmente en el desayuno o como snack. Y es que cuando me pongo, hago ya unos cuántos para tener. Y no pasa nada si no te los comes recién hechos, basta con que los pongas un ratito en la tostadora para que vuelvan a estar crujientes.
Estos gofres son 100% saludables: sin azúcar, con plátano, harina de trigo sarraceno integral. Por tanto son aptos también para celíacos. Y lo mejor de todo es que están divinos 😍.
En este caso he acompañado los gofres de una bola de helado de plátano, higos, arándanos, y almendras. Pero puedes acompañarlo por lo que más te apetezca.
- 300 gramos de harina de trigo sarraceno
- 200 gramos de plátano maduro
- 600 ml de leche vegetal (si prefieres puedes usar leche de vaca)
- Una cucharada de endulzante (o bien puedes prescindir de él)
- Una cucharadita de canela en polvo
- Aceite de oliva para engrasar la gofrera
- Unta la gofrera con aceite y ponla a precalentar.
- Bate todos los ingredientes hasta conseguir una textura homogénea.
- Hecha la masa en la gofrera con ayuda de una cuchara. Mis gofres suelen tardar unos 8 minutos. Aunque cada modelo puede cambiar por eso, mejor lee las instrucciones.
- Sirve los gofres acompañados de fruta, mantequilla de frutos secos o lo que te apetezca.
Al no llevar huevo, puedes probar la masa para saber si quieres echar más o menos endulzante.